Encontrando mayor paz interior
Los seres humanos deseamos vivir en un mundo de paz, pero en realidad no es el mundo el que necesita paz sino las personas que lo habitamos. El entorno es un reflejo de todos aquellos que construimos la sociedad, por tanto, quien debe cambiar somos nosotros mismos.
La paz interior generalmente es un anhelo de todos. Algunos le llamaran bienestar, otros tranquilidad o armonía. Para vivir de esta manera es necesario ser conscientes que no significa que tu vida tenga que ser perfecta o carente de dificultades, sino que es aprender a convivir con ellas sin dejar que perturben.
No existen fórmulas mágicas y únicas para cultivar la paz interior, sin embargo, te comparto algunas pautas que podrían ayudarte a vivir más serenamente:
- Elige tus batallas. A veces discutimos por asuntos irrelevantes que pueden hacerse muy grandes. Podríamos dejar pasar aquellas cosas que no son importantes. Aceptar lo que no podemos cambiar nos ayudará a vivir con mayor fluidez.
- Organiza bien tu tiempo. Enfócate en poco y evita no abarcar mucho. Los pendientes agobian y causan cansancio mental. Procura tener una agenda para organizarte mejor con un horario y una estructura predefinida.
- Solucionar tus conflictos emocionales. Poder soltar y perdonar nos permite ser libre y vivir con mayor alegría. Evita vivir con deudas emocionales que se convierten en una carga.
- Enfócate en tus logros y en tus dones, en vivir bajo tu propios términos y agenda. Evita compararte con los demás ya que tu ser es único y maravilloso. Cuando miras a otros deseando lo que tienen, partes desde la carencia y no desde la abundancia que hay en tu interior.
- Reflexiona y pregúntate siempre: ¿qué me quita la paz interior?, ¿qué es aquello que necesito soltar?, ¿qué cambios debo hacer en mi vida? Cuanto más consciente estés, mejores resultados podrás tener en tu búsqueda de tranquilidad.
- Intenta vivir en el presente. Cuando estamos muy enfocados en lo incierto del futuro podríamos experimentar miedo, preocupación o ansiedad. Lo mismo ocurre cuando volvemos al pasado doloroso, en donde aflora la culpa o el resentimiento.
- Date diariamente un tiempo a solas. Podrías hacer silencio, meditación, oración… Esta será una importante práctica de descarga y a la vez de carga de energía para experimentar paz interior. Además podrías realizar actividades de atención plena como tocar un instrumento, leer, escribir, manualidades, etc.
- Procura sanar tus traumas. Todo lo que no está resuelto del pasado hace peso en el presente. Si sientes que no puedes solo busca ayuda profesional o un guía espiritual.